martes, 20 de octubre de 2009

Viajeros aéreos discapacitados

Discapacitados: Los pasajeros de avión con discapacidades tienen derecho a una asistencia adecuada a sus condiciones sin coste adicional alguno, aunque conviene notificar su situación con antelación al viaje.

Las nuevas normativas europeas pretenden prohibir a las compañías aéreas negar el acceso o discriminar a un pasajero a causa de una incapacidad, excepto por razones de seguridad tales como que el avión sea demasiado pequeño o que no pueda acomodarse a las necesidades del viajero. En estas ocasiones, la aerolínea debe facilitar a la persona afectada la posibilidad de tomar otro vuelo o devolverle el importe del billete.

Los encargados de los aeropuertos deben proporcionar ayuda a los pasajeros con problemas de movilidad reducida así como a aquellos que tengan cualquier discapacidad física, psíquica o sensorial y serán ofrecidos gratuitamente por el aeropuerto y la compañía aérea una vez a bordo.

Por otra parte, es conveniente que los pasajeros adviertan por adelantado que necesitan esta asistencia. Igualmente se evitarán muchos problemas si estas personas discapacitadas realizan la reserva mediante un agente de viajes, puesto que están más familiarizados con los trámites y la documentación necesaria para hacer reservas con requerimientos especiales. De cualquier forma, aunque el pasajero no haya solicitado con antelación la asistencia se exige a los aeropuertos que hagan sus mejores esfuerzos.

Normalmente, los pasajeros que requieran una atención especial debido a una discapacidad serán los primeros en embarcar y los últimos en descender. Asimismo, a las personas con dificultades para moverse les suelen asignar asientos con reposabrazos móvil en la primera línea de asientos frente a la cabina, los cuáles poseen un mayor espacio para las piernas.

Los viajeros con problemas de movilidad tienen prioridad para transportar en el armario de abordo la silla de ruedas plegable, muletas, bastones, caminadoras, así como cualquier elemento que precise esa persona para moverse.

En el caso de necesitar una silla de ruedas para viajar es necesario comunicarlo al hacer la reserva. Sin embargo, esta propiedad del pasajero habitualmente irá en la bodega de carga como equipaje. Pocas veces permiten que la silla vaya plegada dentro del avión en los espacios para la tripulación. Al figurar como una unidad más de equipaje habrá que colocarle una tarjeta identificativa, eso sí, será transportada sin coste extra.

El personal del aeropuerto ayudará a embarcar a las personas con silla de ruedas, les avisará del tiempo que resta para el embarque y las trasladará a la puerta, acompañándolas hasta el avión a través del "finger" (tubo directo) o bien mediante una furgoneta o autobús adaptado.

Una vez en el avión, al no llevar su habitual silla de ruedas, pondrán a su disposición otra silla de ruedas muy estrecha con la que podrán llegar al asiento asignado. El personal del avión también las ayudará a colocarse y tendrán una atención preferente en lo que necesiten.

Además, es importante que la aerolínea con la que viajen dé aviso a su compañía en el aeropuerto de destino para que tengan prevista la recepción del pasajero discapacitado. De todas formas, antes de comenzar el descenso o el aterrizaje conviene que el viajero comente al personal de vuelo que si la silla de ruedas va como equipaje en la bodega del avión al llegar al destino la tengan preparada. Por esta razón los pasajeros con discapacidad serán los últimos en desembarcar.